I Atrás quedó mi pueblo lejano dormido entre montanas y prados; el tálamo de Dios en lo humano presente en mis recuerdos alados.
El viento en el matiz de las flores llenó mi corazón de quimeras; partí con un adiós de temblores buscando las demás primaveras.
II La vida en su vaivén misterioso nos lleva por dolientes caminos; ausentes de paisajes hermosos anhelo de alcanzar lo divino.
Será que allá en la sierra han quedado las horas de dichosos andares, el tiempo de nostalgia ataviado conduce a solitarios lugares.Teksty umieszczone na naszej stronie są własnością wytwórni, wykonawców, osób mających do nich prawa.