Y a los 6 años gracias a la tenacidad de mi maestra y a los mamporros de mi vieja Para estudiar me tomaron examen en la escuela del estado Nº 3, República del Brasil Y me hicieron ingresar en segundo grado; recuerdo aquellas formidables maestras Que tenían las escuelas del estado, sobre todo la de quinto, a la señorita Cuniglio Y en sexto la señorita Texeira, éstas dos últimas fueron de vital importancia para mí. La primera, la Cuniglio, fue la que me ayudó a descubrir mis posibilidades en el campo del arte, pues esta maestra era, era una revolucionaria en el campo de la educación De aquellas épocas; ella fue la primera que traía de su casa reproducciones De cuadros famosos, los colocaba sobre las paredes del aula y nos decía: Escriban sobre lo que ven, entonces cada uno elegía un cuadro e inventábamos Alguna historia del mismo y en otras oportunidades aparecía con un tocadiscos portátil, Tipo valija y nos hacía escuchar los clásicos, Bach, Mozart, Beethoven Y entonces teníamos que dibujar sobre lo que escuchábamos y así nos fue metiendo En el maravilloso mundo del arte. A mí me perdonaba los errores en matemáticas, Dios mío era un burro! Es más, De las tablas de multiplicar me sé hasta la del 5, después chau! Calculadora; Pero no me dejaba pasar un acento ni una coma en castellano, hoy le llaman lengua, pues Sabía que ese era mi fuerte, tal era así que escribía las composiciones, yo, en forma De poemas porque nos daba títulos tales como: y si yo fuera viejo?, me desperté una mañana, la espina y la rosa, nada de la vaca, ni gatita, etc., no! Y a propósito de la espina y la rosa, recuerdo que la escribí en la métrica del soneto Y me valió muchas felicitaciones y ella la paseó por todas las otras maestras, Mostrándola con gran orgullo; ay Dios, aquella original vaya a saber dónde estará?. Pero recordando aquel episodio al contar estas memorias se me dio Por inventar algo parecido, a ver?, ahí va...Teksty umieszczone na naszej stronie są własnością wytwórni, wykonawców, osób mających do nich prawa.