Fui desterrado de mi aldea por mi gente, me consideran un grotesco criminal. Hoy yo protejo a los rebaños y pastores, de sus ofrendas yo me puedo alimentar.
Meses vague por el extenso y ancho mundo hasta alcanzar este bucólico lugar. Ser ermitaño es mi castigo, mi tormento guardo del hombre el pulcro mundo natural.
Cuando las aves se posaron en mi melena de mis pisadas brotó hierba al caminar. Yo descubrí como nacía nueva vida fue un secreto que a la gente quise dar.
¿Quén osa pisar el monte, mi hogar? Quien no lo respete lo pagará, detén tu viajar por este pinar dirige tu rumbo a otro lugar.
Fueron pasando así las eras quizás siglos en mí las ramas comenzaron a brotar, mi cuerpo observo y mi mente se hizo sabia hoy mis pisadas causan un gran temor.
¡Fuera de aquí!
¿Quién osa pisar el monte, mi hogar? Quien no lo respete lo pagará, detén tu viajar por este pinar, dirige tu rumbo a otro lugar.
Si has de avanzar y no hay mas opción da bien tus pisadas, pon atención, ningún animal, ninguna lesión que haya sufrido mi bosque hoy.Teksty umieszczone na naszej stronie są własnością wytwórni, wykonawców, osób mających do nich prawa.