Dos almas dos cuerpos dos hombres que se aman van a ser expulsados del paraíso que les tocó vivir.
Ninguno de los dos es un guerrero que premió sus victorias con mancebos. Ninguno de los dos tiene riquezas para calmar la ira de los jueces. Ninguno de los dos es presidente. Ninguno de los dos es un ministro. Ninguno de los dos es un censor de sus propios anhelos mutilados...
Y sienten que pueden en cada mañana ver su árbol, su parque, su sol, como tú y como yo... entrañas en la más dulce intimidad con amor así como por siempre hundo mi carne desesperadamente en tu vientre con amor también.
No somos Dios. No nos equivoquemos otra vez.Teksty umieszczone na naszej stronie są własnością wytwórni, wykonawców, osób mających do nich prawa.