¡Ay! qué sonido de llaves ¡ay! qué altura de paderes ¡ay! si en esta cárcel me hallo La culpa son las mujeres.
¡Ay! qué ruidos de candados ¡ay! qué subir y bajar ¡ay! ya vienen los soldados Que me van a fusilar
O madre Guadalupana pon tu gracia soberana y échale tu bendición al ladrón que va a salir que va a morir; las cinco son.
Soy con gusto ajusticiado pos grande justicia ha sido pienso que me han condenado no por haberla querido si por haberla matado.
Un domingo qué momento, la muy — mujer me engaño, qué domingo - qué momento a un viva la herida siento salio a misa y no volvió.
Yo con el alma partida y el pecho lleno de hiel me dedique a la bebida y así pasaba la vida sin olvidar a la infiel.
Pude orientarme y la hallé, en una noche de luna, saque el puñal, la trinque la escupí, la degollé, y nada más por fortuna.
Soy con gusto ajusticiado pos grande justicia ha sido pienso que me han condenado no por haberla matado si por haberla querido.
¡Ay! qué ruido de candados ¡ay! qué subir y bajar ¡ay! ya vienen los soldados que me van a fusilar.
O virgen Guadalupana pon tu vista soberana y échale tu bendición al ladrón que va a salir que va a morir; las cinco son.
—:
he doesn't say it but it's implied, he pauses for a moment before going to the next word 'mujer'. There's a brief self-restraint on his part.Teksty umieszczone na naszej stronie są własnością wytwórni, wykonawców, osób mających do nich prawa.