Un ciego que recorría el mundo en oscuridad Inocente como un niño se hundió en fango de maldad Ahogado por mala envidia ni siquiera intentó luchar No sabía que ese lodo le quería equivocar
Mente nublada tenía No le dejaba pensar Y murió poquito a poco Sin familia y sin hogar
En medio de su agonía alguien le quiso ayudar De un árbol anciano y solo una rama cayó al mar
Ese mar de maldad fría que le quería llevar Se aferró al salvador tronco y pies en tierra fue a dar Una mujer de valía, piedra preciosa del zar Volvió a hundir al pobre tonto, antes lo quiso engañar
Amor eterno fingía Mas ciego se dejó estar Se dio cuenta y se fue al fondo En aquel profundo mar
En medio de su agonía alguien le quiso ayudar De un árbol anciano y solo una rama cayó al mar Teksty umieszczone na naszej stronie są własnością wytwórni, wykonawców, osób mających do nich prawa. |
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