Memento Homo, quia pulvis es, et in pulverem reverteris. (x2)
Si he de naufragar en mi tormenta déjame nadar dentro de ti, todo lo que fui, se puso en venta, todo lo que amé, lo que aprendí.
Me quiero morir en tu mirada, me quiero dormir en el que fui. Nos atrincheremos en tu almohada, siempre que el destino tenga a bien.
Hoy la vida baja la persiana se venden sonrisas de ocasión, cerrará el mercado del mañana, cese del planeta por defunción.
Llora el río, soledad, se desangra de agua el mar, tose el cielo truenos y luz, estornuda un alud.
En la fe de Cristo nos ha de salvar, en la fe de que él nos ama nos tenemos que agarrar. No al anticonceptivo, es mejor el sida que un condón, ser gay es una enfermedad, violar a un crío no.
Dios es amor, Dios es libertad. ¡Oh, Jesús! Tu nos traes la paz. Dios es la luz, tolerancia y fe, es tu colega, un amigo de verdad.
Dios derribó la Torre de Babel por no creer, pidió a Abraham sacrificar a su hijo en prueba de su fe. Inundó la tierra, el diluvio de Dios mando a su hijo a morir y el infierno se inventó.
Dios es amor, Dios es libertad. ¡Oh, Jesús! Tu nos traes la paz. Dios es la luz, tolerancia y fe, es tu colega, un amigo de verdad.
Bienaventurados los pobres, bienaventurado el que es gay, bienaventurado el que paga, bienaventurado el que cree.
Bienaventurado el parado y el que no llega a fin de mes, bienaventurada la esposa...
Bienaventurados los pobres, bienaventurado el que es gay, bienaventurado el que paga, bienaventurado el que cree.
Bienaventurado el parado y el que no llega a fin de mes, bienaventurada la esposa, que soporta golpes de un cerdo, que recibe mil puñaladas con una sonrisa y una oración...
Silba una canción la despedida, recita poemas el adiós, se maquilla la melancolía con nostalgia y polvos de dolor.
Más allá del sol y las estrellas, o entre las esquinas de tu amor, puede que encontremos otra tierra, pues la profecía empieza hoy.
El infierno se enfrió y el cielo se cubrió de una telaraña gris, de nubes y dolor.
Vomitaba un volcan, el bosque se quemó, desangrabasé una flor, herida por el sol.
Crucificarse decidió al ver aquel horror.
Llora el río, soledad, se desangra de agua el mar. Tose el cielo truenos y luz, dibujando oscuridad.
Quiero morir en tu mirar, quiero morir y despertar y tenerte junto a mí, amor, sin ti no puedo estar.
Quiero poder recuperar todos los sueños que vendí por puñados de progreso, amor, perdí mi libertad.
El Dorado decidió ir al monte de piedad a vender o a empeñar todo el oro antes de huir.
La pirámide del sol se untó crema solar para proteger su piel del fuego nuclear.
El árbol de la noche triste no deja de reír.
Grita el viento, ¿dónde estás? A la playa que se bebió el mar se abrió el suelo, ataúd. Construcciones, fosa común.
Quiero morir en tu mirar, quiero morir y despertar y tenerte junto a mí, amor, sin ti no puedo estar.
Quiero poder recuperar todos los sueños que vendí por puñados de progreso yo perdí mi libertad. (x2)
Cierre del planeta, almas en liquidación, cambio de negocio, fin de civilización.
Se ha inundado el Infierno, se ha ahogado el Edén, se enquistó la primavera y a las flores que les den.
Ya no queda ningún recuerdo fotogramas del ayer. ¿Quién encarcelará tus besos en la celda de tu querer?
Ya no quedan sueños. Que difícil es dibujar sonrisas en el corazón. Ya no queda nadie con quien naufragar. Sólo queda el ayer.
Animas en comunión, reunión del mas allá, convocados por Satán, que no para de llorar.
Jesucristo con Jahvé sin parar de discutir, ya no hay nada pa` jugar ni a quien manejar.
El Amazonas se ha casado con la lava de un volcán.
Llora el rio, soledad, se desangra de agua el mar. Tose el cielo truenos y luz, dibujando oscuridad.
Quiero morir en tu mirar, quiero morir y despertar y tenerte junto a mí, amor, sin ti no puedo estar.
Quiero poder recuperar todos los sueños que vendí por puñados de progreso, amor, perdí mi libertad.
Hay veces que no sé si exprimir el sol para sentir calor...
(Poema Txus Di Fellatio)
Durante miles de años los seres humanos hemos podido disfrutar del mejor regalo que los dioses dieran jamás a ningún ser vivo:
La brisa, el viento, el hermano Sol y la hermana Luna, campos y praderas donde ver crecer a nuestros hijos, amaneceres bañados con el perfume que estornudan las flores en primavera, puestas de sol decoradas por los sueños aún por conseguir y, aunque parezca mentira, inteligencia.
Pero el hombre blanco despreció aquel tesoro, y a medida que la vida le sonreía, él le contestaba dando patadas al destino.
Si alguien lee esta carta, no olvide que el fin de esta civilización se debió al egoísmo, codicia e incultura de la raza humana. Los hombres ya no somos mamíferos, el ser humano no se convirtió en depredador; la raza humana somos simplemente un virus, matamos, crecemos y nos multiplicamos.
Por eso nos extinguimos, por eso las aguas se tragaron nuestra civilización; la verdadera Atlántida éramos nosotros. Y por eso dejo escrita esta nota, para formas de vida inteligente venideras.
CUANDO LOS HOMBRES ESCUPEN AL SUELO, SE ESCUPEN A SI MISMOS.Teksty umieszczone na naszej stronie są własnością wytwórni, wykonawców, osób mających do nich prawa.