Un hotel vulgar, una vulgar habitación una noche más de paso en una población. Veo las luces de la ciudad, me invade la emoción, siento el pulso marcha atrás, me pierdo más y más en la niebla de un recuerdo que no logré olvidar. Sólo una vez y fue como una eternidad, sólo una vez y me estremezco al recordar, horas de rara lentitud, horas eternas de auténtica verdad. Siento su calor, olfateo su presencia, surge en mi interior el deseo con violencia. Solamente fue un día de felicidad, un rayo de luz en medio de la oscuridad, sólo una vez y fue como una eternidad, sólo una vez y me estremezco al recordar.Teksty umieszczone na naszej stronie są własnością wytwórni, wykonawców, osób mających do nich prawa.