De antaños existires derogados al vesubio en tu pompeya encaramado en el peñasco del abismo al no retorno un mundo tras el mundo no podrías percibir
Embelesada en tu belleza hacia el flagelo te limitas en orgullos testarudos, vanidades que descentran a la linea circundante
Soy yo quien devora a la luna
Soy yo quien subyuga la tempestad y a las mareas
Soy el gran pesar gran diluvio de las edades del mundo te sientes tan seguro de poder controlarla seducido por la dama de las aguas dan paso a los nuevos glaciares en romances congelados en IsTeksty umieszczone na naszej stronie są własnością wytwórni, wykonawców, osób mających do nich prawa.