Soledad, fue una noche sin estrellas cuando al irte me dejaste, tanta pena y tanto mal.
Soledad, desde el día en que te fuiste en el pueblo sólo existe, un silencio conventual.
Soledad, los arroyos están secos y en las calles hay mil ecos que te gritan sin cesar:
Soledad, vuelve ya. A quitar con tus canciones para siempre los crespones, que ensordecen en mi soledad.
Soldedad, vuelve ya Vuelve ya Ay, mi Soledad.
Soledad, los arroyos están secos y en las calles hay mil ecos que te gritan sin cesar:
Soldedad, vuelve ya Vuelve ya Ay, mi Soledad... Teksty umieszczone na naszej stronie są własnością wytwórni, wykonawców, osób mających do nich prawa. |