No es mendigo solo aquel a quien la suerte cruel arrebató pan y hogar, y con acento doliente bien inclinada la frente, busca piedad al implorar.
Porque hay mendigos sonrientes que se arrastran complacientes ante el oro y el poder. Talvez son acaudalados, pero están más deshonrados que el que pide de comer.
Este es el mendigo de oficio. Este es el mendigo por vicio. ¡Este es el mendigo peor!
Los que engañan, los que mienten. Los que en su pecho no sienten jamás erguirse el honor: Tantos hipócritas viles, que ocultos como reptiles, hincan el diente traidor.
Este es el mendigo de oficio. Este es el mendigo por vicio. ¡Este es el mendigo peor!
Mas por esos pordioseros, cortesanos y rastreros, para ellos no haya piedad. Esos mendigos ladrones son peste de las naciones, y lepra de la sociedad.Teksty umieszczone na naszej stronie są własnością wytwórni, wykonawców, osób mających do nich prawa.