Infecunda, senil catequesis de la credulidad infrahumana que en la vaga niebla del destino depositas la ingenua confianza;
convicción extraviada y hambrienta que no crees ni en tu propia enseñanza y buscando afianzar tu dominio armonizas a un dios con tu causa...
El olvido es la mortaja que oculta a quienes bebieron de tu iniquidad, y de tu vino que lava las culpas de quien se deja por él embriagar. Y aunque muerdas con sagrada rabia anida en tu pecho la necedad.
¿Dónde está tu fuego incorruptible? ¿Donde están tus reyes? ¿Dónde está tu espada insobornable que supo acallar inocentes?
Genocida entidad que aun deliras la utopía de tenerlo todo a tus pies, aun siendo ciega, aun siento tan ciega, lees tu destino en tu podrida piel. Y aunque grites babeando alabanzas es cada vez mas amarga tu miel.Teksty umieszczone na naszej stronie są własnością wytwórni, wykonawców, osób mających do nich prawa.